A la vuelta del día laboral uno se encuentra con distintas problemáticas que, pueden llegar a lograr que la reacción de un conductor pueda variar de ser pacífico y correcto, a creerse un militar a bordo de un Tanque para pasarte por arriba.
Uno de estos disparadores para el desarrollo intespestivo de ira, proviene de un efecto natural a partir de un agotado sol, que desciende a lo largo de toda la avenida transitada creando un efecto de encandilamiento total.
Como se observa en la cargada Avenida Libertador, saliendo del barrio de Retiro, la estrella más importante e imponente, deja inservible cualquier elemento para poder menguar esa potente luz. Como la "visera" del auto ya no alcanza a cubrir y la mano es inútil, la opción de los lentes negros (o del color top que tengas) se convierte en un bien muy preciado para la seguridad propia y ajena.
1 comentario:
Me encantó! Tanto es así que le mandé un recomendación de lectura a America TV informativo. jajaj Una fan
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